Lactancia Materna: Los primeros días tras el parto.
Lactancia Materna: Los primeros días tras el parto.
En general la lactancia se establece sin problemas, pero en ocasiones, las mayores dificultades suelen aparecer durante los primeros días y con el paso del tiempo todo va siendo más fácil. La mayoría de estos problemas son fáciles de resolver y pueden evitarse si la madre conoce lo que puede suceder estos primeros días.
Dar de mamar por primera vez. ¿Cuándo se empieza?
Tras el parto, cuanto antes, mejor para ambos.
Este primer contacto, no es realmente para darle de comer, si no como una especie de bienvenida, para calmar el estrés del parto y aprovechando el reflejo de succión, que es muy vigoroso en estos momentos y suele estar muy despierto y receptivo las primeras horas, para que nos conozca y le conozcamos y para enseñarle a mamar.
El dar de mamar lo antes posible, favorece la contracción del útero más rápidamente, haciendo que la pérdida de sangre tras el parto (loquios) sea menor.
Si nos han realizado una cesarea o pusieron anestesia epidural o si se le ha dado ya al bebé algún biberon, también se podrá dar el pecho al bebé.
La primera leche: el calostro.
El calostro es un concentrado de factores inmunológicos (defensas). Aunque se produce en pequeñas cantidades, satisface todas las necesidades nutritivas del bebé durante los primeros días. No necesita más, ni agua ni suero glucosado.
El calostro también tiene un efecto laxante que ayuda al bebé a eliminar el meconio (la primera caquita) y prepara su tubo digestivo, antes de digerir leche madura.
Tomas muy frecuentes: mejor para la madre y para el bebé.
Las tomas en pequeñas cantidades, hacen que el bebé, al sentirse menos lleno, desee mamar más a menudo, lo que estimula la producción más rápida de leche. El recién nacido hace mas cacas, y no tiene ictericia. Se pierde menos peso y se recupera antes el peso del nacimiento. Además, las tomas frecuentes (cada hora y media o dos horas), permiten que el bebé aprenda a coordinar los movimientos necesarios para succionar, tragar, respirar, ahora que la cantidad de leche aun es poca.
¿Cada cuánto tiempo se le da de mamar?
Cada bebé puede tener unas necesidades diferentes, es por ello, que mientras unos desean tomas mas cortas y frecuentes, (mas de 8 al día) otros maman más tiempo y hacen pausas más largas entre toma y toma. Otros no muestran mucho interés por el pecho durante los primeros días y están más adormilados.
Es bueno tener en cuenta, que los primeros días, normalmente, la mama va a emplear mucho tiempo amamantando a su bebé.
Si el recién nacido es dormilón y no muestra interés en mamar, es importante animarle a tomar el pecho cada dos o tres horas. Para ellos procuraremos:
- Ofrecerle el pecho cuando se encuentre despierto o en un sueño ligero (cuando mueve sus ojos bajo los parpados)
- Que la luz no le de directamente en los ojos, así los abrirá y se interesará con más facilidad.
- Dejarle solo con el pañal, ya que el calor en exceso puede inducirle al sueño.
- Hablarle dulcemente, y darle un masaje suave sobre la espalda desnuda, su cabeza o acariciar su frente y mejillas con un pañito húmedo.
- Intentar ensayar otras posturas para darle el pecho.
A mayor succión, mayor producción.
Cuanto más mama el bebé, más leche produce la madre y lo contrario: cuantas menos tomas hace, porque se ha llenado con biberón o porque se conforma con el chupete, menos leche producirá la madre. Así de sencillo.
Las madres que empiezan a dar biberones antes de que su producción de leche esté bien establecida (al rededor de los 3 meses), se encuentran en el círculo vicioso de tener que ir dando más leche artificial y menos leche materna.
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